Llegaste a mí como un rayo de sol
iluminandome con tu sonrisa y dandome tu calor.
Te quedaste tatuada a mis pensamientos
con cada gesto con cada abrazo y cada beso robado.
Te fuiste como el viento
tan indispensable en mi vida, mi gran necesidad,
Solo espero que vuelvas, como tu recuerdo,
que nunca me dejes para que juntos...
Vallamos al cielo.