Sueños truncados
Porque he de añorar la luz del mañana,
si con el sol que me quemaba del ayer,
me basta para evocar.
Cuando arriban las altas olas de la noche,
me preparo con los remos de mis sueños
y comienzo a navegar
entre el agraciado amor que emigró.
Y vuelvo a habitar entre
los mares de sus cálidos besos,
a apreciar de nuevo el suave
oleaje de su blanco cuerpo,
mientras me golpea con furia
la dulce armonía del ayer.
Sobre el horizonte despejado de mi horas,
busco refugio para mi desabrigado sentimiento,
mientras flotan mis ardientes deseos,
entre un vaivén anclado de sueños truncados
y sin luminosas mañanas.