Cuando tú me sonríes
¿Cómo puedo describir
todo aquello que me pasa
cuando siento tus pupilas
hurgar fijamente las mías?
Y es que eso lo acompañas
con una hermosa sonrisa,
que es caricia sosegada,
que enajena mis sentidos.
La magia de tu mirada,
tu cautivante sonrisa…
y esos traviesos hoyuelos
que en tus mejillas se forman
atrapan todo mi ser,
abrillantando hasta el cielo
que resplandece de luz
y hasta las rosas suspiran.
Cuando tú me sonríes
se alboroza mi corazón,
juegas con tu mirada,
me envuelves con tu aroma
y me acaricias el alma,
quedando así prisionera
de tus ojos…, de tu boca…
y sigue un beso, ¡no…!, mil besos.
Nunca dejes de sonreir
porque cuando lo haces
todo adquiere color y…
¡sonrío yo también!.
maria_dg