Todavía existe una canción de amor,
una esperanza, un sueño cautivo.
Un olvido de tu recuerdo
(que no llega).
Una historia mal acabada,
un taxi de madrugada,
un infierno eterno
en el que vivo.
Un suspiro cautivo,
una sonrisa de metro,
un cielo, (de tu boca)
del que me echaste.
Todavia existen mil cuentos
y ninguno.
Todavia existe la vana esperanza
de volver a verte.
Aún, todavía, quizás y tal vez;
quiero no quererte,
pero te quiero...
MIGUEL PANDUJAR