caminando corriendo sonriendo por algun lugar
en donde cabe los arboles los ríos ni las hojas del matorral
las montañas, el manantial, los jardines de babel
los nevados de sal
los condores en las torres de la ciudad
suave como ella, arisca como la maleza que en la esquina aparece
lagunas lagos mares que las tempestades te repiten siempre
el cerro donde habité desparece y se convierte en una calle de ajedrez
que le dirás a tu compatriota hermano donde navegar
que le diras a manuelito que el aire es agua descompuesta oxidada por la gravedad