Gracias preciosa por la esperanza
Que un día tuvimos
Gracias por la alegría
Tu joya constante
Gracias por tu calor
Siempre divino
Y gracias
Por pretender ser mi amante
Y gracias por todos los instantes que nos dimos
Por todo lo que reímos
Por cuanto quisimos salir triunfantes
Gracias por ser como un guante
Con tu dulce voz de trino
Y gracias por ese vino
Que prometía ser excitante
Tu cuerpo juntito al mío
Y la pasión por Levante.
Y esto no te lo digo
Ni irritado ni por molestarte
Te lo digo porque me nace
Decírtelo al dejarte
Te lo digo porque yo quiero
Agradecerte sin enojarme
Lo que pasó no lo medimos
Y ocurrió lo inevitable
Lo que tenía que suceder
Cuando los besos son distantes
Sin probar su sabor
El amor es muy frustrante
Y por hablar nos fuimos
Con todo por delante.
Tal vez si somos amigos
Seamos más tolerantes
Por mi parte me gustaría
Que de ti no puedo quejarme.
Gracias por la ilusión
Que tenía yo de adorarte
Sabiendo que eres de Venus
Y yo soy de Marte.