MAMA
A veces quisiera ser diferente, un modelo a imagen y semejanza de nuestro creador,
A veces quisiera renacer de nuevo, forjar mi vida y construirla con el mejor diseño,
A veces quisiera hacer tantas cosas pero soy como soy, y tengo un gran corazón,
Un corazón que pocos pueden ver, y que nadie lo conoce más que Dios nuestro señor…
Tantas veces me han culpado de ser insensible, de no merecer lo que la vida me ha dado,
Tantas veces me he creído tan crueles palabras que sólo dañan mi alma sin merecer,
Tantas veces he tenido que tragarme el llanto amargo que derrama mi corazón,
Tantas veces he tenido que curar al alma con mis letras el don que me ha regalado Dios,
Tantas veces he guardado mi dolor haciéndome fuerte y no bajar la mirada ante tanta desilusión…
Tantas veces y todo ha sido envano, no importa cuanto haga, no importa lo que sienta,
Siempre me encuentro ante un tribunal y un juez que juzga y condena de la manera más cruel,
Que hiere y lastima cual filosa espada que mata y deja sangrar mi herida, sin dar marcha atrás…
Como quisiera llenar de flores tu camino, y cambiar mis espinas con puro amor,
Como quisiera regalarte mi alma en este día, pero me has hecho tanto daño,
Aunque este sentir no evita sentirme culpable por no poder amarte con el corazón,
Y en este día tan especial decirte lo lo más bello y bajar a tus pies lo más valioso del mundo,
Me duele no poder hacerlo, aunque ya te he perdonado…
Pido perdón a mi Dios y a mi madre del cielo, que alivie mi corazón y lo libere de este sentimiento,
Que quiero sentir que TE AMO, más que nada en la vida,
Que quiero borrar el pasado, aunque cada día le hagas a mi alma una herida,
Que quiero gritar a los cuatro vientos que eres mi musa, mi Reyna más que quien me dio la vida,
Pero tu desamor y tu egoísmo me han condenado a vivir siempre una pesadia,
Una herida que no sicatrisa porque pareciera que sólo vives para amargarme la vida,
Y reprocharme día a día mi existencia y que de tenerme a tu lado estas arrepentida…
¡Se bien que no te imaginas cuanto duelen tus palabras,
Y quizá nunca lo comprendas, porque siempre tus oídos están tapados para mí,
La ceguera de tu orgullo y tu rencor a la vida,
No te permiten ver las lágrimas que de mis ojos brotan cuando el corazón deja de latir,
El alma mía se cansa y siente que no puede más, cuando quiere decirte TE AMO MAMA!…
Hoy no será diferente, Si llega a tus manos esta carta, seguro la rechazarás,
Dirás como siempre que todo es falso y que no tiene valor,
Mientras mi alma llorará y mi corazón se destrozará,
Por eso prefiero leérsela a tu alma, y dedicársela a tu corazón,
Que a través de mi Dios lleguen a ti mis palabras,
En un suspiro, con el más limpio y puro amor…
02:48 pm – 03:20 PM