Con cariño para mi madre
Tú, igual que María, me llevaste a Cristo
con sabios consejos formaste a este hombre,
tú, Eva para mí solo, me pariste con dolor
me diste un cuerpo y una insólita alma.
Mujer, en tu perpetuo y sublime dolor de parto
madre, mujer virtuosa al fin y siempre
Iluminaste mi sendero con luz, igual que María,
sufres y te alegras en mis agonías y dichas.