Escribí, tu nombre en el aire, y el aire se lo guardó
si será bello tu nombre, que el aire se lo quedó!
Escribí, tu nombre en la tierra y la tierra lo absorbió,
para germinarlo en flores, que simbolicen mi amor,
Escribí, tu nombre en el agua,
y el agua se lo llevó,
para echárselo a los ríos,
y así lleguen a la mar.
Donde tu nombre en la arena,
grabado lo encontrarán,
en la espuma de sus olas
mar adentro a de llevar.
Tu nombre, tu hermoso nombre,
cual un canto de sirenas,
el viento me lo traerá,
y al recibirle del viento
con celo lo e de guardar,
e de escribirle en mi alma,
con tinta pluma o cincel,
o lo e de grabar con fuego,
donde, a de permanecer.
Tu nombre, tu hermoso nombre,
tan fácil de pronunciar,
solo tiene cuatro letras
¿lo pueden imaginar?.
Para pronunciar tu nombre,
solo diremos, MAMÁ.
Para ti, Doña Mela.
Al recuerdo de mi Madre
y en Homenaje
a todas las Madres,
Nicolás Ferreira.