Las amarguras inmensas cual horizonte,
Y se discierne… que allá a lo lejos se pierden
En la línea donde se difuminan
Con el tiempo, dejando huellas indelebles;
Pero es tan larga la espera
Mientras las amarguras se bañan,
En el rojo oscuro de una taza de café
Quien consuela mi soledad, mi dolor, mi letanía,
En el intento fallido del olvido;
Aquí donde solo la vista de los cerros azulados
Que enmarcan mi ciudad me dan un poco de alivio,
Y aunque intente bórrate hasta del umbral de mis sueños,
Te aferras constante y fiel a mis pensamientos
Que están de ti acostumbrados;
Y mis amarguras se ciernen…atreves del sentimiento
Nublando el horizonte
Es aún más larga la espera
Que ya ni en el tiempo… se difumina.