poemaria

Mi alegría de vivir

Mi alegría de vivir

( Luz Amparo Sundkvist -\"Chila\"- ) 



Mi niño querido,
eres la luz de mi vida
mi sol, mi lucero.

-Luz Amparo Sundkvist -

MI ALEGRIA DE VIVIR

En este dia especial
yo te quiero confesar,
que eres la luz de mi vida 
que eres mi sol mi lucero, 
que eres mi niño querido 
que te quiero, que te quiero. 

Mi alma se me enternece 
hasta al punto de llorar, 
cuando me miro en tus ojos, 
es algo sensacional. 

Con tu sonrisa me robas 
el alma y el corazón, 
eres mi niño adorado 
eres mi adoración. 

Hoy te traigo hasta el altar 
a saludar a mi Dios, 
para que te guarde siempre
y te de la bendición. 

Cuando vine a este país 
llegué con gran illusion, 
en busca de muchos sueños
pero tu fuiste el mejor. 

Y al tenerte entre mis brazos 
late mi corazón,
con ese amor maternal 
que florece hasta el final. 

Niño amado de mi vida 
velaré siempre tu sueño,
y le pido a Dios bendito
que me dé vida y salud, 
para verte crecer junto 
a tu hermana que te adora, 
que es la niña de mis ojos 
y también es mi paloma. 

Yo les brindo mis cuidados 
a mis niños adorados, 
con el apoyo especial 
de mi esposo más amado.

Con él que quiero vivir 
por el resto de mi vida, 
para cuidar a mis hijos 
que son toda mi alegría.

Mi lindo chocolatico 
pedacito de mi vida, 
que Dios te bendiga mi niño,
cada día de tu vida. 

Y a mi lindo cafecito 
florecita de amapola, 
que la virgen te acompañe,
y no me la deje sola. 

Que quiero verte crecer 
protegida en mi regazo, 
cuidándote como flor 
que se abre paso a paso.

Así quiero terminar
este sencillo homenaje,
que es lo que quiere decir 
una madre a su linaje. 

Con sentimiento profundo 
porque sé que ella lo siente, 
y desde el alma la admiro 
porque sé que es muy valiente. 

Luchadora como nadie 
madre trabajadora,
que Dios la bendiga Liliana
porque eres ganadora. 

Y en mi tendrás una amiga 
de las que nunca se van, 
de las que mira de frente
cuando ofrecen la amistad. 

Porque el tiempo me demuestra 
que eres un ser especial, 
de corazón muy sincero 
y de gran humanidad. 

Que los santos te protejan
y bendigan tus pequeños, 
que tú eres una gran madre 
y sabrás velar sus sueños.

-Luz Amparo Sundkvist –”Chila”-

(16 de Diciembre del 2006.
Estocolmo, Suecia).