En el silencio de mis días llegaste tú…
Mitigando mi dolor, llenando mis horas de alegría.
Despacito y con ternura me fuiste conquistando
Haciendo de mí otoño un rosal en flor.
Como poder olvidarte; si me has dado todo lo que nadie me dio.
Nuevas experiencias en mi vida.
La confianza de un amigo.
La dulzura de tu presencia
Y esta pasión desenfrenada.
Hoy doy gracias a ti y a la vida… por lo que anoche aconteció.
Anoche mi sueño… se hizo realidad.
Una vez más, vi tu piel desnuda
Recorriendo mi cuerpo y ansias de mujer.
Llevándome al éxtasis de este loco deseo
Que al mirarme en tu mirada, provocas en mí.
Anoche mi sueño…se hizo realidad
Al tenerte frente a frente y regalarte mi cuerpo.
Al sentirte en el mío… al escuchar tu voz.
Al sentir tú deseo impregnado en mí ser.
Anoche mi sueño… se hizo realidad.
Nuestros cuerpos desnudos, al fin se vieron.
Yo vestida de tu piel, tu vestido con mi ser.
Soñando en un mundo sólo para los dos.
Anoche mi sueño…se hizo realidad.
Hoy te deseo… una vez más.