Llévame bella mujer, llévame a la oscuridad contigo, todo se pondrá luminoso. Llévame, vamos, te daré lo que siempre te prometí.
No defraudaremos en este largo camino, estaremos protegidos por el rey del inframundo, vamos, ¡No pasara nada!.. Solo disfrutemos del camino a la tierra prometida, a la tierra que te prometí. Donde nuestras almas merecen estar juntas. Donde estaremos libres de todo lo malo de este mundo acechado a la guerra, que sin duda, no deja soñar. Pues, en otras palabras, estaremos en otro mundo, quizá, un mundo mejor, donde podamos desear que la noche fría y bella nunca termine. Donde el fuego no quema, y todo se vuelve un lugar cálido y fresco.
Llévame y te prometo que todo estará bien.
¡Llévame, y tan solo dejaremos atrás a ese dios criado por el engaño y la mentira!