Y sí en la compleja virtud matemática del amor,
lográramos al menos concebir la variación de signos,
tal vez caminaríamos mejor, se nos multiplicarían las razones,
compartiríamos ideas y solamente, a ciegas y en conjunto,
las haríamos más nuestras cada vez.
Pensaríamos en enteros, como nuestros corazones,
Y jamás los acercaríamos a las fracciones,
Los quebrados son enredados y nefastos,
pero eso sí, de la luz que habita dentro nuestro,
ojalá se elevasen a la máxima potencia.
Si estuviéramos juntos, lo sé, sabríamos ser dos,
Restaríamos palabras que estén de más,
Sumaríamos acciones que nos faltasen,
Jamás nos dividiríamos entre el destino,
Fuésemos sin duda alguna una unión exacta.
Ambos nos perteneciéramos cada vez más,
Nuestra ilusión fuera mayor que; todo,
Todo esto sería el equivalente a lo que soñamos,
Al fin conoceríamos el valor absoluto del amor,
Veríamos la integral con la que se compone el infinito.
RCarías.
Guatemala