La vida te regala poesía,
dale alas y permítele volar,
y veras que te vas a deslumbrar,
viendo la lógica de su ironía.
La poesía no es tuya no es mía,
ella es libre y en su constante andar,
trae risa de cielo y llanto de mar,
es poesía agua donde hay sequía.
Poesía, graciosa, elegante y loca,
a tu voz nada ni nadie limita,
me derrite el aliento de tu boca.
Más, si te he de ver poesía escrita,
diré aun así, que la escritura es poca,
para describir tu esencia infinita.