en los tremulos adoquines de la vida,
la ilusión fantasea el ego
dandole pasión alusiva al sentir
creando orgias metaforicas al pensar
vibrando como volcán en erupción
los mastiles de la desnudez integra.
es tan profundo la sordides de su mustia
espectante queda de oir adentro
para calcinarlos en sus quimeras ondas
y estallar como cuarternio ayer.
acongojado y somnoliento queda
para expresar en sus futuros bacos
la flexión de su quebranto todo
testigo de su llanto previo
para dejar salir su amarga mustia.