Dime que mis llegadas presientes
y que mis pensamientos sientes
cual estruendoso susurro
que se mete en tu mente
y derrumba tus muros.
Dime que cuando estoy contigo
se desvanecen tristezas
y te invaden alegrías
que alimentan tus días
para llenar las brechas
de tus distancias conmigo.
Dime que anhelas una vida a mi lado
en plena libertad de emociones
y sin ataduras ficticias,
donde no sintamos asfixias
ni aparezcan nubarrones
o fantasmas del pasado.
Dime que me amas
en presente y futuro,
a partir de nosotros,
de nuestro encuentro,
que quieres conjugar
con el mío tu tiempo
en una composición de rostros
que trasluzca en el mío,
!el tuyo!