Mariposa azul que revoloteas
embriagada de la dulzura de mi alma,
vas aleteando con elegancia
quebrando en mi las nostalgias.
Hasta ayer gemí desesperada
con mil nudos en mi garganta,
entre neblinas y humos…
mientras el eco, sepultaba mis palabras.
Todo lo perdí… la paz, las ilusiones
y hasta lo que se llama calma.
No avistaba para mí una esperanza
y mis lágrimas hacían ronda en mi falda.
Aquí estás mariposa…
dibujando piruetas en el aire
y deleitando mis momentos con tu danza.
En ti se refleja mi sentir y mi ansia,
eres el espejo en este instante,
de mi karma.
En mi pecho desolado,
solo envuelto por recuerdos fantasmas,
eres tú mariposa itinerante,
la frescura, el alivio … la esperanza.
Oh, mariposa sigilosa…
en esta soledad mía y errante,
es que acaso hoy me traes
de mi amado ausente… su alma?
Liel