No puedo salir de mi bache emocional,
Me siento perdido, en esta espiral
De pensamientos negativos, sin César
Que abruman esta vida, insocial...
La soledad se apodera de todo mi eral,
Campos que viven secos en su brazal,
Huérfano soy, de alegrías, sin disfrutad Y miro por el balcón y vuelvo a entrar...
Agobiado y lleno de complejos en singular,
¿Quién soy yo y por qué vivo amargado? Esta es la pregunta que le hago a mi soñar,
Sueños perdidos, en mi aldea, decepcionado...
Así pasan los días por el reloj de mi ocaso,
Son duros mis versos, pero es mi realidad,
No le encuentro sentido, a nada en mi caso,
Me pierdo entre los segundos, de mi eternidad...
Por esto pienso sin vivir, sin saber cómo actuar,
La brújula de mi ser, no señala sonrisas en mi hogar
Y vuelvo a caer en las grutas de mi hangar,
Cerrado por vacaciones y envuelto en soledad...
¿Qué camino sigo, hacia donde va mi circular?
Si ya no siento, ni me mi propia identidad,
¿Quién soy hacia donde se dirige mi caminar?
Vivo sin amigos, sin fe en la ciudad, de mi cavidad...
Lo he perdido todo y todo lo tengo en mi penal,
Pero algo me impide salir y sacarlo a pasear,
Vivo encerrado en las cloacas, en lo personal
Y no puedo, estoy atrapado y sin respirar...
Este verso lo escribe la poesía, de toda mi verdad
Que vive obsesionada, sin entender mi enfermedad,
Por la que estoy jubilado y muero en mi realidad,
Angustiado, porque alguien embargo, mi eternidad...
Me deje llevar, por esta senda de dolor y ambigüedad,
Cayendo en picado, sin solución a mi gris, embargo
Y ahora no puedo, ni sé por dónde huir, de mi soledad,
Sed y angustia vital, en la que se hunde mi ego, sin aval...
Modesto Ruiz Martínez/sábado, 25 de mayo de 2013 Enviado desde mi iPad