*** Versos de la Rosa ***
*Delicadeza*
Quien no se asombra con su grácil hermosura
cuando el aire transporta efluvios de lavanda,
que enamoran esta perfección del surco bello
encantando la meiga de su esperanza eterna,
mientras me asombra la hermosura rectilínea
inmenso horizonte de este campo de aromas,
mientras esas azuladas nubes de este campo
se asombraban de su paralelismo campesino.
*Hermosura*
Cuanta obra necesita al hombre ser tan recto
cuando fuera de esa campiña dilapida el ego,
asimilando siempre la podredumbre que vive
entre las cloacas de ese su camino casi ciego,
tanto empeño estéril necesita tener el obrero
no va al ejido para ver la labor de recto obrar,
le embadurna siempre con todo lo más dable
en lugar de tener su responsabilidad de vivir.
*Perfección*
Cuando el aldeano que ha sembrado lavanda
contempla al amanecer la hermosura morada,
siente en su honrado corazón de hombre útil
un enajenamiento y la tristeza de su soledad,
aunque el fruto sirvan al templo de la belleza
donde la elegancia femenina de vivir fascina,
acompañando a sus recolectas de los aromas
que difundiesen la hermosura de la fertilidad.
*Exquisitez*
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
30 de mayo del 2013