Entre tu poema y mi poema hay
Hay una barrera de quebrantos,
De mentiras y verdades,
De risas y llantos.
Tú sabes que yo te leo,
Yo se que tu haces lo mismo,
Negarlo no es posible,
Es certero silogismo.
De ti lo se todo
Reconozco entre miles tu aliento,
Aun entre sombra y silencios,
Sabes que no miento.
No será posible
Ya jamás podre tener,
Mi cuerpo y alma están desangrados.
Te di lo más deseado,
La llave de la prisión,
Donde yace…
Mi corazón encadenado.
A mi reja ya no llega,
El resplandor de nuestra luna,
Solo el raudo pasar del fantasma
De los desprecios,
Que van tirando al viento,
Solo sombras y silencios.
L.M