En la obscuridad blanca, en el silencio absoluto
En la absoluta certeza de lo que no existe.
En el frío, en el dolor
Allí estaremos todos
en un mundo que no espera
en un mundo que no perdona...
El último que apague la luz, aunque ya estemos todos ciegos
El último que cierre la puerta, aunque ya nos quedamos afuera...
y es que nunca estuvimos dentro, solos en la multitud,
una cara más en la muchedumbre, un cero a la izquierda,
un punto en el párrafo, un grano de arena...
¿Qué es un árbol que se cae y nadie lo escucha?
Lo mismo que yo cuando me siento en el parque...
Solo, frío, obscuro...silente
Aquí sigo, estoico valiente,
en la búsqueda de la compañía que no existe,
con la esperanza de sentir lleno un vacío que no se ve,
pero que consume lentamente en agonía una fracasada vida llena de éxitos...
Soy árbol, soy eco, soy sombra.
Eres árbol, aunque te vea y te escuche...
Si soy yo el primero en escapar...
Que el último cierre la puerta y apague la luz.