mayrakarina

el dia que renaci

¡como estoico soldado!

acostumbrado a cargar su arma

dispuesto siempre a entregar el alma

aunque se quede desmembrado

 

acostumbrado a luchar sin tregua

nunca derrota entrega

acostumbrado a sentir el yugo

del pasado, ¡mi verdugo!

 

es irreal el sentimiento crudo

cuando dado el paso definitivo

todo se vuelve absurdo

y la costumbre entra en conflicto

 

como puede hacer falta la tormenta

cuando llegaron los días de sol

como la serenidad amedrenta

y ¡que arraigado mi dolor!

 

heridas que en un lugar secreto escondí

de una vida angustinate que yo no elegi

mas el pasado no gobierna mas mi vida

cada día, cada noche ¡este viaje es de ida!