A dos horas de conocerte
tus labios mordía
mis manos metía
entre tus senos
entre tus piernas
acariciando tu sexo caliente.
Estábamos frente a frente
no había que platicar
con ese deseo mortal
acuchille tu mente con palabras
y tu cuerpo sacrifique
clavándote como un Cristo en la cama.
Y fuiste mía, mía, tú mi luna
en esas noches rojas
en que sacie mi cuerpo
de pasión y lujuria.
Pervertí tu corazón
de niña buena
de niña reprimida, que escondías…
Y te entregaste a mí, a la lujuria
sin pensar en nada, sin negarte a nada
mandando los prejuicios a la chingada.
Fui y vine tres veces al día
hasta saciar mí sed de tu boca, de tu sexo
y tus ojos brillaban en la oscuridad
como parte de tu esencia, mi Luna.
Y mentiste como pecadora que eres
escondiendo los besos que me diste
ocultando las veces que me poseíste
cuando negaste que deseabas morir,
sobre mi…
Oh mi Luna.
Me pregunto si Dios perdona?
Luna, fuiste mía
en esos días fuiste de miel
y me embriague de ella;
de la miel dulce de tu boca
del aguamiel de tus senos
de la miel que brotaba de tu ardiente sexo
y me alimentaste mi ser
con sexo y con placer…
Y me preguntas si fue un error
si fue un error conocerte?
Amarte sin medida
y que tú lo hicieras mi vida…
Acaso el lobo se arrepiente?
Después de comerse a su caperucita.
Cuando cree en Dios un ateo?
Se arrepiente un pordiosero que le den dinero?
Como arrepentirme mi Luna!
Si me diste tu cuerpo y tu amor en un sólo tiempo.
Ahora estas bailada tequilera
el amor ya sabes, va y viene!
te acuerdas Luna?
te acuerdas mi Luna como gemías…
te acuerdas mi niña?
lo que te decía cuando te cogía…
La canción, si!
Fuimos felices juntos!
Mientras comía de tu sexo gordo
que tienes entre las piernas.
Claro que te extraño!
Adlerritter