Sentir el ocaso
de la noche
es desaparecer totalmente,
sin luz,
en el remanso de la obscuridad.....
es morir indefinidamente,
el olvido se negara
a cubrirnos de tierra
y el ser amado gritara nuestro
nombre sordamente,
cayendo en un ciclo vital
de muerte arrancada e involuntaria.
Me amparo
en esta ceguedad mortal,
en esta temblorosa asfixia
de obscuridad,
buscando el silencio refugiado,
el exilio de esta flor marchita,
.... en el ocaso de estos tristes días.
Muero a todas horas,
en todos lados,
fuera de mi,
en el viento,
y en este dolor insoportable,
y no podemos hacer nada....
me sembrare en este infierno
letal de tristeza naufragada
y perdida.
Sentir el ocaso de noche
es estallar en soledad,
es correr sin prisas,
es levitar
sobre el amor
después del amor
hasta volvernos cenizas.