HE TENIDO CINCO MINUTOS
CON UN HERMANO, UN HERMANO
QUE EN LOS HUESOS LLEVA A UN HOMBRE
EN LA SANGRE A UNA MUJER
EN SU PIEL HAMBRE DE NIÑOS
Y EN SUS OJOS LA FORTUNA DE SU TIERRA
HE CONOCIDO A LA MANO HAMBRIENTA
LA BOCA SEDIENTA ESCARCHADA DE SEQUIA
UN CORAZÓN PENANTE, AMARGO Y FRIO
CORAZÓN ATADO AL SUFRIMIENTO
NACIENTE DE LAS HONDURAS
CAMINANTE ENTRE MALES AL ACECHO
CUERPO DESGASTADO ENTRE RIELES DE DOLOR
ZAPATOS ABRIGO GLORIOSO SANGRE RETENIDA
CONOCÍ EN TAN BREVE TIEMPO UNA
VIDA PEREGRINA VESTIDA DE COLOSAL CALOR
AGRIENTANTES FRIOS, SUEÑOS PENDIENTES
HOGARES EXTRAVIADOS, MONEDAS PRICIONERAS
AZULES BOCADOS SIN SON NI SAL, NEGROS TRAGOS
PARPADEOS SIN GOTA NI DULCE, QUETZALES MALDITOS
HE VISTO A UN HERMANO-HOMBRE MIGRANTE
QUE DENTRO DE ÉL CARGA EL MANTO DE SU PUEBLO
MIGRANTE DE GANAS FULGENTES Y LACERANTES DESTINOS
HE TRATADO CON AQUEL QUE TIENE UNO DE LOS PEORES MALES
A AQUEL QUE LO ÚNICO QUE TIENE FRENTE A SUS OJOS
ES LA QUEMANTE INCERTIDUMBRE