Pasaba el tiempo y mi vientre crecía, con gran ilusión te esperaba cada día
Te amaba tanto aun sin conocerte, solo imaginaba como serias
Tus dulces manitas, tu tierna carita, tu linda sonrisa,
Al fin llego el día tan esperado una tarde de domingo con mucho dolor te tuve entre mis brazos
Pero al verte mi rostro se lleno de alegría eras como un ángel que del cielo venia
¡Oh cuan agradecida estoy con Dios por este regalo!
Por la oportunidad de verte crecer y el tenerte a mi lado
Eres para mí, mi tesoro más amado