Ya sé, he dicho suficiente para herir las palabras que nunca supiste decir. Una fantasía en lo alto de una realidad que golpea, y tú fuiste el sueño de un mendigo rico en amor.
Oh, dime que fue un sueño.
Oh, dime que fue real.
Oh, dime que escuché tu voz expresando tus sentimientos; dime que fue el cielo abrazándome.
Nada que ocultar más que el infinito en el brillo de tus ojos oscuros. Estás aquí para poner de cabeza mi mundo?
Quebraste la fe y los gritos de la eternidad implorando piedad, y fuiste el sueño de un desolado sol sin luz.
Oh, dime que estuviste conmigo.
Oh, dime que nunca te fuiste.
Oh, dime que me dormí en los brazos de tu cielo…
Grita el dolor, grita la piedad, grita el universo y tú dónde estás para escucharlos?
Dime, dime que fue un sueño.
Dime que no te huiste.
Dime que fuiste las fantasías de un sol desolado.