Te mirare en el tiempo
tras los cristales de
mis ojos cansados
viendo en tus años pasados
todo el fulgor de
juventud dotado.
Tu delgadez de cuerpo
contrastaba con la firmeza
de tus ideas clara,
siempre ágil, siempre sana.
Vuelve tus ojos
al silencio de tus miradas
y....recuerda con cariño
mi paso por tu ventana.
Siendo la selva un silvido
de mi boca ya callada,
y encontraras que hermosas
fueron tus madrugadas.
Ese claro obscuro del cielo
donde llovían ilusiones,
se recogieron en gavillas
con amor y sin temores.
El cántaro donde cupieron
está vacio y sin flores,
y el jardín que formamos
tiene aromas en sus rincones.
Vuelve tu vista al inicio
vuelve a tu risa y canciones,
el espacio ya regados
fué precioso en sus albores.