Me siento perdido y no sé qué hacer
Viven mis sentidos sin memoria, se fue
Como el viento que despierta, el amanecer
Y donde mire no siento, mi memoria volver…
Ya no se lo que hago en la cama, cundo me levanto,
Se han borrado hasta los sueños del ayer
Y camino dentro de un laberinto embrujado,
Dentro de mi vida, donde me siento desvanecer...
Soy cómo un barco que ha naufragado
Y no puedo emerger, del fondo de mí ser
Que más quisiera yo, que no vivir perdido,
En una isla donde nadie escucha, mi padecer...
Si muero en un sueño, navegando en mi velero,
Donde ya no sienta ni respire mi placer,
Donde mi oxígeno, haya abandone mi cuerpo
Y pase a ser pasado sin ningún, amanecer..
Así me siento, así vivo la amargura, del ayer
Donde la línea continua en los latidos del corazón,
Ya es continua y mi cuerpo inerte, sea pasado, sin ser,
Quizás escriba desde la tumba, de mi desilusión...
La verdad es que este cuento es real, dentro de mi piel
Y cuando abro los ojos, ya me encuentre en la muerte,
Haya donde la nada, solo es un misterio, sin amanecer,
La depresión vive entre angustias, por mi mala suerte...
Desgracia que dibuja mi ser lacrado, en un panteón,
Donde entre los fuegos fatuos ascienden, las almas al cielo,
La mía quizás vuele ya, por el infierno y su estación,
Ya no esperó nada de la vida y os escribo desde el oscuro velo,
Donde la muerte, es el fin y ya nada es vida, ni emoción.
Modesto Ruiz Martínez /domingo, 09 de junio de 2013 Enviado desde mi iPad