La guerra del francés la bautizaron
tan solo recordarla ya entristece,
y hablar de tantos muertos enfurece
porque sé de qué modo los mataron.
Entraron a traición y los sitiaron,
de los galos hablar, no me apetece,
será porque al nombrarlos aun escuece
aquella herida abierta que dejaron.
Muy cruel fue la barbarie recibida,
por cada bayoneta ensangrentada
un cuerpo dejaba escapar su vida.
¡Suchet! La tierra fue bien defendida,
lucharon todos contra tu manada,
y esto, en mi Tarragona no se olvida.