Aquella mirada angelical, parecía más dulce que de costumbre. Tus ojos, que antes no me habían mirado, Lo hicieron por primera vez. Ese momento, pasó tan rápido, Que cuando abrí los ojos, ya no estabas ahí. Te fuiste, sin decir adiós, te marchaste, sin volver atrás me abandonaste. En un abrir y cerrar de ojos, Todo se había acabado. Fue un sueño triste y cruel, Pero que a la vez me hizo recordarte. Recordar esos ojos mirándome, Esa boca hablándome, y ese corazón susurrando a gritos que me amaba. Y que deseaba volver. Pero te fuiste, sin decir adiós Te marchaste! Y esa imagen se borró de mis pensamientos Y cada vez que la recuerdo, Un frío puñal se clava en mi alma Y mi corazón siente un vacío tan inmenso, Que no puede callar… y llora… A tu recuerdo le llora