Te recuerdo niña hermosa,
como olvidar a la pequeña latosa
la que con su charla
me hacia la vida esplendorosa.
Te quiero y no te olvido
vives en mi mente, habitas en mi respirar,
te adueñas de mi alma.
Zozobra hay en mi corazón,
se clava como daga. Mi ansiedad sangra
al palpitar su sufrir.
Me encuentro dormida
y desde tu partida
voy evocando tu nombre
al percibir tu imagen en mis anhelos.
Existes en mí, ¡te alojas en mi evocación!
Con mis sueños juegas y haces de ellos
un mar de añoranzas.
Ahogo mis penas al sentir tu presencia
mis noches nadan cautelosas;
callan, para escuchar
el eco sonoro de tu risa.
Al verte juguetear en la playa de la ilusión
mi deseo ancla en el puerto de la esperanza,
esperaré una tregua de fe para mi avidez.
Al recordar, sonámbula me encuentro,
escucho al viento susurra tu esencia
y siento tu espíritu latir,
sé que no te alejarás de mí;
tan sólo, fuiste de viaje XELHA.
Magali Aguilar Solorza
(Quiet Night)
Martes/Junio/11/2013 6:48:59 pm
Autora mexicana
Publicado en AZAHAR REVISTA POÉTICA No 91