TucididesLopez

MEA CULPA

Siempre escribo para el día de las madres,

para mantener de la mía su vigencia,

pero debo reconocer

con remordimiento de conciencia

que nunca le he escrito a mi padre.

 

De él aprendí muchas cosas,

unas buenas, otras no tanto,

seguro no fue un santo

pero tenía una calidad humana

maravillosa.

 

La pobreza nunca mermó

su amor por sus hijos,

mucho menos su responsabilidad,

porque con sacrificio y humildad

cargó con entereza el crucifijo.

 

Por eso pido me disculpes padre mío,

realmente no tengo excusa,

hoy entono un mea culpa

para rendirte un homenaje merecido.