El de las Rosas

De un invidente a su Amada

Sentir en mis manos la tersura de tu piel,
percibir tu presencia perfumada,
el suave susurro de tu vos
y tu sonrisa acrisolada.

Oirte caminar sin rumbo fijo,
compartir tus momentos de alegria,
la suave brisa de tu llegada,
y la soledad de tu partida.

Y asi en el silencio que me invade,
tu eres el calor que me da vida
la armonia de una brisa matinal,
y el calido transcurrir del dia. 
 
Rebosas energias en primavera,
todo es agitado y alegria desbordante,
Por tí, sé de la llegada del verano,
y despues quietud pues todo inverna.

 
Por eso mi corazon no esta desierto,
tu amor me da el impulso necesario
y asi no me importan los obstaculos
pues me has enseñado a superarlos.

No me importa lo sinuoso del camino
si a tu lado todo para mi es llano
perdi la vista...pero no el camino
porque seguro me llevas de tu mano.

De un Invidente a su amada.

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