ivan rueda

PERDÓNAME

 

Perdóname este otoño,

mis hojas que lleva el viento,

las canas que voy ganando,

las fuerzas que voy perdiendo,

perdóname mis nostalgias

ahora que me hago viejo,

perdóname que me entristezca

cuando me miro al espejo.

Perdóname que me olvide

mis pájaros en pleno vuelo,

perdóname que abandone

mis lágrimas en un pañuelo,

perdóname si mi barco

nunca se ancla a tu puerto,

perdóname mi princesa

que se marchó a otro cuento,

perdóname la belleza

que se le niega a mis versos.

Perdóname mi vida insulsa,

mis dolores en secreto,

mi camisa sin carmines,

mis bolsillos con remiendos,

perdóname mi angustia,

mi cárcel y mi convento,

perdóname la triste historia

de mi pobre sentimiento.

Perdóname la osamenta

de mi estúpido esqueleto,

el naufragio de este hombre,

el fracaso de sus huesos.

Perdóname si te confundo

a veces con mi deseo,

con la fiebre de mi carne,

con la leña de mi fuego,

perdóname si con mujeres

quise tapar agujeros,

los huecos de mi amargura,

los pozos de mis desvelos,

perdóname mi locura,

la luna de mis anhelos,

perdóname que en mi altura

nunca despunte un lucero,

perdóname si mis cuentas

siempre acaban en cero,

perdóname las inmensas

ganas de verte el plumero.

Perdóname si en mi mayo

nieva como la hace en enero,

perdóname si mi sol

sólo da rayos de hielo.

Perdóname la soledad,

las rosas que no te entrego,

la sonrisa que me guardo,

los años que mata el tiempo,

perdóname mi flor sin lluvias,

tu agua que nunca bebo,

perdóname mi mar sin olas,

perdóname mis ríos secos,

perdóname que no te alumbre

la llama que llevo dentro,

tú eres la única sombra

que da luz a mis silencios.

Soy como un ángel sin ojos

que no puede ver el cielo

que cuando bate sus alas

no se levanta del suelo,

por eso para mirarte

te busco en mis adentros,

por debajo de mi sangre,

en los baúles del sueño,

perdóname si al soñarte

lo hago siempre despierto

porque no quiero dormirme

con el corazón abierto.

Perdóname si al tocarte

me equivoco de cuerpo,

perdóname si te beso

en unos labios ajenos,

perdóname que te llame

por un nombre que no es vuestro,

perdóname que te escriba

a unas señas que me invento,

perdóname si en las calles

contigo nunca tropiezo,

perdóname si a mi lado

está vacío tu asiento,

perdóname que te quiera

igual que quieren los muertos.

 

Perdóname, AMOR, perdóname

si te busco y no te encuentro.