¿A quien tengo yo sino a Dios?, pues como el nadie me amara
Cuando lo que hago, no ha sido suficiente, para complacer a los demás
Cuando la carga es pesada y apenas sigo parada en este lugar
¿Quién entendería mi corazón como él? ¿Quién entendería mi razón?
Si encontrara algo en mí que no está bien, él tiene el manual para arreglarlo
Los que me miraban con agrado se han olvidado de mi lucha y dedicación
Y lo que veo en sus miradas, nada tiene que ver con humildad y amor
Una sola falla se toma, para convertir un amigo en un acusador
¿A quien tengo yo sino a Dios, cuando mi corazón ya no aguanta más?
Cuando me siento sola y no encuentro ayuda en ningún lugar
Cuando quiero levantarme y nadie extiende su mano para ayudar
Perfecta me veía ante los ojos de ellos mientras luchaba sin cesar
La carga espiritual de un hogar entero, sola la he tenido que llevar
Me canso, a veces me caigo, me arrepiento y me vuelvo a levantar
¿No es Dios mi juez, y no es Dios quien me ha de juzgar?
¿A quién tengo yo sino a Dios?, pues solo él me restaurara
¿Y quien de vosotros fue perfecto o podrá prometer que nunca fallara?
¿Acaso no hubo alguien que alguna vez tus pies ayudo a levantar?
¿No sabes que Dios me perdono y me sentó en la misma mesa donde hoy estas?
¿Se te ha olvidado que al que más se le perdona, mas ha de amar?
¿A quien tengo yo sino a Dios?, pues él me sostendrá
Solo él me ha visto conmigo misma luchar, y conmigo misma ganar
Él está en mi debilidad y me acurruco en su pecho mientras fuerzas me da
No importa quién me mire de menos o quien me abandone, el me salvara
¿A quién tengo yo sino a Dios?, pues él me guiara
A el llevare mis cargas, en el reposare, el me ayudara y en el esperare
Solo el me dará fuerzas cuando no tengo y me dará gozo en el desierto
Cuando fallo, él es mi abogado y cuando necesito corrección, mi Padre es el
¿A quién tengo yo sino a Dios?, pues solo él me ama tal como soy