Era fría la tarde como pocas...
mis pasos los iba uno a uno dejando tras de mi..
a veces llegue a pensar que se escondían bajo mi sombra...
Crucé la esquina y allí te vi....
Tus rodillas me recordaron el hierro forjado...
retorcido y junto por las soldaduras, en ese intento tuyo
de reducir tu cuerpo a lo mas minímo,
asumiendo aquella posición que recordaste ocupar dentro de tu madre
así como queriendo burlar la helada..
Mire tus ojos opacos, tu mirada perdida despegada de la vereda
se notaba como te condenaba viajando de ti fugitiva
Tu labios quebrados, tu tez partida
no habia siquiera vestigio de la ultima sonrisa..
Solo el azul de alguna vena que se te asomaba
te hacia resaltar del aquel paisaje gris del concreto...
donde te mimetizabas con mucho éxito...
todos pasaban...pero nadie te miraba
sus andares de prisa te obviaban.
A tu lado tu compañero fiel...
confidente de esa hambre que se notaba en sus costillas..
dormía tan pegado a ti...como el hollín a un caño..
trataba de robar aquel vestigio de calor
que dejabas escapar entre tanto tiritar..
ajeno a tu realidad ......él ya llevaba en su lomo las cicatrices de la suya.
Entre despojos de trapos se asomaban tus manos
enroscadas como ciñéndose a esa imaginaria taza de café...
pero esta se quedo en el ruego ya perdido
y en el ahogo infundido del alcohol
y de un cigarro a medio fumar recogido
Baje mi mirada.. Seguí mi camino..
aun podía sentir tu respiracion haciendose cada vez mas lenta
pareciera que racionabas hasta la indiferencia
Tu piel quebrada y tu imaginación haciendote su presa
tus ojos siguen opacos y tu mirada perdida en aquel portón
tus rodillas dobladas...
y tus sueños entre sabanas de cartón.
Giusy.