muy temprano al alba
contemplo aquel monte
es una mañana cálida
que engalana el horizonte
el frio abandona mis manos
las flores han despertado
el sol alumbra entre mil rayos
las aves finalmente han cantado
careciente de atención
se manifiesta el amanecer
pero que conmoción
que muere solo al atardecer
aquel cálido y a la vez frio,
gozo de inefable penumbra
ante el cual yo siempre rio
cuando el dulce sol alumbra