Franklin Sandi

Hormiguero de ojos

 

La ciudad es un hormiguero

de ojos que ruedan a las cloacas.

 

Las sombrillas paralizan

el tiempo en las aceras.

 

Teje una mujer entre sus piernas

un nido de imposibles y mira

cómo sus sueños ruedan de ojos en ojos.

 

Las camisas cansadas

evaporan sus sueños.

 

Ojos ladrones desvisten

a las muchachas y sin pedirles permiso

les sacan radiografías tibias.

 

El sol apaga sus reflectores

y el jadeo de la ciudad se adormece

con el ronquido de los motores.

 

Miro el reloj que quiere hipnotizarme

y borro al anochecer los ojos

de todos los pájaros ciegos.

 

Soy el ojo solitario

de una máquina fotográfica

que se guarda en su propia

cloaca.