Andra

Prohíbete...

 

Ya es tiempo de prohibirte

seguir encadenada al ideal de un hombre que se ha ido,

de aquel cuyo amor no fue suficiente para ti,

de aquel que se ahonda en otros brazos.

¡Ya! es tiempo de prohibirte seguir…

pensando, sintiendo, llorando,

y esperando en aquel que ya no es…,

ya es tiempo

de desatar el corazón

y dejarlo latir en paz,

en esta actualidad,

prohíbete sus recuerdos,

sus besos.

Sus caricias sábelas…  hoy de otra

y nunca más tuyas o nunca antes tuyas…

¡Ya es tiempo!

de prohibir el nacimiento de nuevas lagrimas

de ayeres ¡ya! idos,

ya es tiempo

de que todo lo prohibido a tu alma vuelva a ser permitido,

como un deseo,

como un nuevo motivo para un beso,

como un despertar sonriendo en una mañana de luz,

dejar atrás las sombras que carcomen el amor,

ese amor que desea ser habitado por un hombre de hoy,

un hombre actual

que no cargue en su historial días de dolor,

de engaño, de olvido,

deja llegar ese amor renovado

mas fuerte

mas empoderado en tu corazón,

¡ya es tiempo!,

¿qué esperas?

Dime… ¿qué esperas?

que se te sequen los ojos

y no puedas ver más; las rosas entre tus manos,

no vivimos…  para alguien,

¡entregamos! nuestro amor a alguien

que lo valore, lo cuide, lo respete

y que sobre todo

lo corresponda, ¡ya es tiempo!

de prohibirte este sufrimiento

que solo debilita tu ser,

tu cuerpo,

tu alma,

tu corazón,

tu espíritu,

tu esencia,

tu caminar,

tu mirar,

tu soñar,

tu respirar,

tu sonreír…

¿qué esperas? 

a volverte centenaria en la espera de una ilusión,

de un idea…l

que como lluvia venida del cielo

en la tierra árida se consume,

¡ya! es tiempo,

de releer tu historia,

de hacerla tuya,

de reinventar nuevos besos

en la humedad de tus labios

y en la seda de tus noches,

nuevos deseos…

Prohíbete

volver a sufrir,

solo entonces podrás mirar a quien en verdad te ama

y ha estado esperando por ti,

a que le digas YA ESTOY AQUI...