¿Cómo caminar sin heridas
tu silencio,
hacer locuras en tu boca,
derramarme en ti gota a gota?
¿Cómo vestirme con tu mirada
lago adentro,
encender de cirios el olvido
y la mustia madrugada,
arrebatarles a las nubes tu sonrisa
y la implacable verdad de tu pecho?
Hoy existo porque te nombro,
y me entrego sumiso al ardor de tus dedos
cuando pintas de fuego la urgencia del lecho.
Hoy mi excusa es tu franca desnudez
para hacerme grito en tu callada piel...