mauriwana

mi tiempo, mi psicosis, mi lamento.


Si el tiempo tuviese cuerpo de humano,
de adrede le pisaría los talones 
para que sienta lo que yo cuando él 
impide mi avanzar despreocupado.

O a mis días les faltan horas
o mis horas pasan vacías
o las agujas corren relativas
silenciosas para mí, imperceptibles. 

Pero el clamor de dedos en mis sienes
suenan más fuertes que la luna
en el día su silencio no lo escucho,
en la noche me acaricia y me mece.

La dosis precisa baja entonces
de psicosis en transición día-noche
la celda es más pequeña ahora 
que la vivo pesimista.

Surcando marcas en mí adentro
va el tiempo con agujas,
pero a lo que escuche tu nombre
como matico curará las heridas

Porque hay mil formas de morir
no cuenta el dormir,
solo dos formas me hacen vivir,
tiempo, una vez ya nací.

Me queda una forma de que al igual
que un fénix o Jesucristo
después de sus sabidas,
descubra mi elixir,
mi devuelta a la vida.

Planeo no morir todavía
pero mientras tanto y durante 
haré productivos mis días
y no interrogarme después de muerto
¿porqué no lo hice antes si tuve tiempo?