Tomé un libro
de un estante
y me hice su amigo
en un instante.
Me habló de cosas
que yo no sabía
y en sus páginas gloriosas
yo crecía.
Me hizo advertencias,
me dio consejos
y con mucha paciencia
me llevó lejos.
Me dio distracción
y me entretuvo
y me dio instrucción
como ninguno.
Le dio imágenes mentales
a mi cerebro
y en momentos cruciales
me aró el terreno.
Me regaló historias
y pensamientos
y así entre sus hojas
fundé cimientos.
Me dio confianza
me dio respiro
y sirvió de labranza
a mis cultivos.
Con él, dibujé sonrisas
y fabriqué carcajadas
y ante sus páginas escritas
a veces el llanto me acompaña.
Tomar un libro
es todo eso…
si lo haces tu amigo
veras que es cierto.
Autor: Alejandro J. Díaz
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Bajo el Número 1308125565640
Maracaibo, Venezuela.