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De paracaĆ­das II

Así es que esa mañana, bien temprano, el entrenador, le preguntó si quería grabarlo, el precio sería mucho, mas a Nair no le interesaba tener registro de eso. Además, sería la prueba de esto en cualquier momento de la pequeña, que era capaz de negociar por su silencio...

Con el consejo, del joven, les comunicó que cuando se trataba de parejas, es la mujer la que se tira primero y en este caso, es mejor que lo hiciese la hija.Asi que Nair desde abajo ve como se tira primero, esta llega muy contenta de su experiencia, tan hermosa.Interín se intercambian las ropas un enterito amarillo, de una tela especialy gafas protectoras, parecen alienígenas.La mamá estaba super nerviosa, y furiosa, porque ella no había previsto el lanzamiento de su hija. Que en la confusión, llevaba el dinero, en un bolsito que lo dejó en un banco, este nunca apareció.Tuvo que pagarlo doblemente; durante todo el episodio, se acuerda de su mamacita, que por abrir el pico, le trajo nuevamente problemas.¿Nunca podría compartir o confiarle algo?Que tiene que decírselo a su hija, nada menos...Cuando Nair llega arriba, está pletórica desde un comienzo sin puerta la avioneta y el viento corre de todos lados porque el piloto tampoco lleva, y el entrenador está sentado detrás de ella. Así que en el momento que le dijo-vamos salta, se suelta de costado- La adrenalina de la caída libre que dura segundos, su efecto, la mantuvo, por tres días más o menos. Y esto quedó como un secreto compartido.El año de la primaria comienza y se enteró de que la madre de una de sus compañeritas de su hija, estaba haciendo el curso de paracaídismo con el mismo joven. Un día esta apareció con el video, de que ella si había grabado. Lo visualizan juntas. A Nair cuando lo ve, se le sube el alma al cielo.Si, a ella le hicieron abrir la puerta y lanzarse al vacío.Y comentó a su hija, de haber sido así, no sé si me hubiera animado.Porque abrir la puerta, no fue ni parecido a recibir el viento desde un principio, que la había promovido desde un comienzo. Fue una experiencia inolvidable.Y recordaron lo que le había contado el entrenador que había saltado con gente de todas las edades, que el mayor había sido un señor de noventa años,que también, seguramente era una cuenta pendiente y cuando reunió a sus familiares y amigos para festejar su cumpleaños, además de apagar la velita pasó el video, de su lanzamiento en tandem