Aprenderé a vivir con este vacío,
con esta ausencia que quema mi alma,
aprenderé a sentir que ya no me amas
y que tus besos ya no son para mí.
Aprenderé a caminar sin tu presencia,
siempre fuí una sombra tras de tí,
me gustaba tanto seguir tu aroma
y tener tus manos para mí.
Aprenderé a reir aunque por dentro sufra,
no me verás morir...si hoy no sale la luna
mañana otra vez la esperaré.
Y tú... descansarás de mi, amor...
al fin nadie te causará pena
y toda esta congoja que siento
algún día desaparecerá.
Y ya no habrá quien calme mis penas,
ya nadie me escuchará,
sin tí seré un valle sin aire
que muy pronto desaparecerá.
Y todas nuestras palabras
no las vuelvas a ocupar,
inventa palabras nuevas
cuando a alguien vayas a enamorar.
Y ya no serás mi jardinero,
mi médico ni mi guardián,
ni mi sol ni mi luna,
por Dios...no quiero llorar...
Por siempre vivirás
en el jardín de mi poesía,
yo no sé que será de mi vida...
pero recuerda,tan solo recuerda,
todo lo que fuiste para mí.
Y esos caminos que juntos recorrimos
no los vuelvas a transitar,
busca nuevos horizontes,
ya no quiero más llorar.
Te burlarás de todas mis cosas,
no lo quiero ni pensar,
que ridícula me he de ver ahora
que me empiezo a derrumbar.
Dime que no fuiste un sueño,
que todos los momentos juntos existieron
y que nuestros recuerdos, los llevarás
muy dentro de tí.
Dime que no fuiste un sueño,
que todo lo que me hizo vibrar
salió de tus caricias y tus besos,
que los placeres que nos dimos
los disfrutaste tanto como yo.
Dime que no fuiste un sueño,
que eres tan real como el sol,
que tu cuerpo vibraba al sentir
cerca mi pasión.
Y yo...seguiré siendo tuya...
no lo digo por posesión,
soy mujer de total entrega,
yo te dí mi corazón.
YOLANDA BARRY.