Entre la fragancia de mil rosas,
Y la luz que irradia los luceros,
Se quedara tu piel de niña,
Maravillando el firmamento.
En tu mirada se refleja
el verde mullido del paisaje y
Una sonrisa que desarma poemas,
Eres armonía de música selecta,
Aun sin verte ya mi corazón te amaba,
Entraste a mi alma al perderme en tu mirada
Así eres tú en mi vida, niña traviesa
Me vas llenando de alegrías nuevas
El mundo para mí ya tiene un nombre
Es el tuyo la dulzura plena.
Contagias mi vida de ilusiones
Y nuevas metas hay en el horizonte
Sin ti en mi vida… un ser vaciado de esperanzas
Contigo en ella un mundo de alegrías me acompañan.
Princesa del tiempo y del espacio,
Sigue caminando en esta vida, incierta
Sigue contagiando A cada paso,
Con tu sonrisa de música remota,
Y Con tu andar llenando de esperanzas
Nuestra casa.