De madrugada me despierta tu beso
Atolondrada te vistes para nuestro final
Viaja conmigo por última vez al litoral
Porque el paso del tiempo no es para tras
Los rieles sostienen nuestra esperanza
Los vagones comienzan a marchar
Pero nuestros besos a declinar
Con tu voz dormida dices no estar
Un roce de labios te intenté robar
Mientras el puerto olvidado nos ve llegar
San Antonio saluda nuestro cansino andar
La locomotora frente al mar nos quiere anclar
Y es que te traje hasta acá para no declarar mi sola amistad
Para quien fue la mujer que en mi universo se quiso marchar
Ahógame en el silencio para que te pueda escuchar
En estas arenas de frio intenso acariciando un sol otoñal
Amada mía que hoy de mí eliges arrancar
Te vez excepcional a través de tu voz un dulce cantar
Caminando por barrancas la pobreza se quiso ausentar
Y la playa solitaria cayendo en tus ojos el sol amaranto celestial
El oleaje de Llolleo nos intentó infructuosamente reencontrar
Corre antes que nos deje el tren al regresar
Siente como el claxon del locomotor nos llama al terminal
Te amo te dije al pasar, con sonrisa incomoda me dijiste la verdad
Y es que no te puedo besar, ojalá algún día me logres perdonar
Mientras el acero comienza a rodar y tu mirada a declinar
Dices que despliegue la cámara y saque una fotografía casual
Para que en mis recuerdos exista esté dulce atardecer frutal
El recorrido por los vagones buscan que el amor no sea un funeral
Y es que te vuelvo a preguntar casi llegando a la estación central
¿Me amas mujer celestial? Mientras tus ojos allí parecen de cristal
Eliges el más sutil de los abrazos para decir que te vas
San Antonio, el puerto y la playa fueron nuestro encuentro final
Porque podrían pasar los siglos y aún así te podría amar.