Murialdo Chicaiza

Pueblo Mío

  

Pueblo mío que construyes edificios

y caes de los andamios hacia la muerte

que vives en guetos de flores tristes.

Pueblo mío que estás lejos

de las mariposas de los poetas burgueses

de colibríes de plumas tornasoladas

y arribas a tus enfermedades ciertas.

Pueblo mío que no sabes de Withman

pero si del valor de las hojas y las hormigas.

Pueblo que vulneras tu alma

entre dioses y adioses, solo pueblo.

Pueblo que desesperas en la esperanza

entre la herrumbre de tu vieja redención.

Pueblo oscuro que habitas

en cubiles de imposibles luces.

Pueblo campesino, crías hortalizas

blandes semillas de taciturnos arcoíris

que pierdes tu naturalidad

en los artificiales sótanos de las cities.

Sostienes tus trémulas rodillas

con tus despiadadas manos

-deformadas manos-

que cantas tus falsedades para ti

lejos del soneto perfecto

y de los madrigales clásicos

-de los burgueses bardos-

Porque ya nada es inocente

ni los versos ni los niños

sólo la demacrada pobreza

de nuestro pueblo

merece construir una raída bandera

el grito de una musa mutilada.

 

Finalmente, pueblo mío,

 me perteneces como el olvido

como el pez que nunca repartí,

por eso, toma este vacío

esta alma que te atisba de lejos

que huye delante de tu gloria

y tropieza con sus derrotas.