Yo para decir cuánto te quiero
No necesito ni una palabra,
Me sobra con este sentimiento
Que diario crece dentro de mi alma…
Eres sutil aire que respiro,
Eres el arrullo que me calma,
Fatua caricia que en este ensueño,
Esta absurda obsesión agiganta…
Junto a ti reprimo mis sentidos,
Todo te lo grita mi mirada;
Sorda quedarías si tú oyeras
Los latidos que del pecho escapan…
Mi deseo, enfermedad sin cura,
Herida que duele y que me mata,
Castigo que nunca se termina,
Prisión que la vida me desgarra….
Sin embargo, acepto la condena
Te daré mi vida si lo mandas,
O aceptaré el perdón si decides
Decir amor, que tú también, me amas…